miércoles, 28 de mayo de 2014

Los Jardines de Recreo

“Los Jardines de Recreo” se pusieron de moda, en Madrid,  en el siglo XIX. Eran unas zonas verdes, ajardinadas, con árboles, que se abrían al público en ciertas épocas del año: de primavera a otoño. Además de paseardisfrutar de la naturaleza, se podía asistir a espectáculos: conciertos, representaciones teatrales, bailes y había otros espacios dedicados a la diversión: cafés, restaurantes, espectáculos de circo e incluso en alguno de ellos (“Los Campos Elíseos”) había una Ría para realizar paseos en barca.

Los primeros “Jardines de Recreo” se construyen hacia 1834, por un artículo de Larra (Revista Española nº20 de junio de 1834), en el que habla de que no había estos Jardines en Madrid y que sí existían en otras ciudades europeas.
Se llegaron a construir una gran cantidad de ellos, de distintos tamaños y con varias dotaciones encaminadas a la diversión del público. Eran frecuentados por las clases medias, las clases más populares iban a los merenderos de las afueras, donde podían bailar al aire libre. Hubo un intento de Jardín de este tipo en la Plaza de Alonso Martínez, “los Jardines de Minerva”, donde los usuarios se podían llevar la merienda de casa.
María Isabel Gea, en su libro: Diccionario Enciclopédico de Madrid nos llega a hablar de 15 “Jardines de Recreo”, dejando fuera de la relación el Jardín Botánico de Alfonso XIII (Avda. Complutense).
Por un problema de extensión, hablaremos de algunos de ellos, los que nos parecen más interesantes, curiosos y frecuentados por los madrileños; y que pueden ser una muestra de este tipo de espacios ajardinados, dedicados a la diversión.
“El Jardín de las Delicias”
Fue el primer Jardín que se abrió; en 1834. Estaba situado en el Paseo de Recoletos, entre las calles de Bárbara de Braganza y Almirante. El acceso se realizaba por esta última calle, citada, y la entrada costaba cuatro reales. Estaba dividido en tres niveles distintos separados por barandillas de hierro. En el nivel intermedio, había una plazoleta con una fuente en el centro. El tercer nivel estaba ocupado por una huerta. Sobre este “Jardín de las Delicias”, Larra dice: “… está abierto en Recoletos, es pequeño pero bonito. Tiene un estanque y dos grutas, es útil para almorzar en las mañanas deliciosas de primavera y pasear en las noches de verano”.

“El Jardín de Apolo”
Se construye en 1835 en la glorieta de Bilbao, entre las calle de Divino Pastor y Manuela Malasaña. Era un jardín muy frondoso con caminos, siguiendo un trazado laberíntico. Además, había un teatro, una fonda, cenadores y mesas rústicas. Era frecuentado por las clases medias. Larra sobre este Jardín dice: “... está en el extremo de la calle de Fuencarral, no goza de un posición muy ventajosa, pero una vez allí, el curioso lo reconoce como un verdadero establecimiento de recreo y diversión”.   
“El Jardín de la Alhambra”
Estaba situado junto al teatro del mismo nombre que se hallaba en la calle de Libertad, esquina a la calle de San Marcos, fue construido en 1870. En las noches de verano la gente salía, en los entreactos, a tomar el fresco en el Jardín. El teatro siguió en funcionamiento hasta 1905, pero el Jardín duró poco tiempo.


Anteriormente, entre las calles de Augusto Figueroa, Libertad, San Marcos y el pasaje de la Alhambra existía el Convento de las Mercedarías Descalzas de San Fernando, construido en 1698 y demolido en la Desamortización, en 1869, un año antes de que se construyera el teatro y el Jardín. 


Figura 1. Esquema de la ocupación del Convento Mercedarías Descalzas de San Fernando 

En la Figura 2 se puede ver una vista del estado actual del Pasaje de la Alhambra que es un patio cerrado entre viviendas.


Figura 2. Vista actual del Pasaje de la Alhambra

“Los Jardines del Arquitecto Ribera”
Estaban situados en la calle de Barceló; hoy día todavía, existen con el mismo nombre, detrás del Museo de Historia de Madrid, el antiguo Hospicio. Se conserva la Fuente de Ribera (“Fuente de la Fama”), figuras coronadas por un ángel con una trompeta, en la parte inferior hay imágenes de delfines, jarrones y angelotes. Dicha Fuente fue concebida por Pedro de Ribera para formar parte de la Plaza de Antón Martín, donde se instaló, a mediados del siglo XVIII, próxima a los hospitales de San Juan de Dios y de Nuestra Señora de Montserrat. 


Figura 3. Vista actual del espacio de los Jardines del Arquitecto Ribera. Fuente de la Fama

 “Jardines del Paraíso”
Estaban situados en el Paseo de Recoletos. Se construyeron en 1862 y era un parque muy frondoso con caminos laberínticos, calles y glorietas. En el centro, había una glorieta con una noria donde se sentaba la gente alrededor de la misma. En otros espacios se bailaba y estaba rodeado de árboles, estatuas y columnas. Como en todos los “Jardines de Recreo” había espectáculos.

“Jardines de los Campos Elíseos”
Ya hemos comentado como nace la idea de los “Jardines de Recreo” y siguiendo la moda existente en Europa, el promotor catalán José Casadesús encargó al arquitecto Lucas María de Palacio y Rodríguez la redacción del proyecto de los “Campos Elíseos” En 1864 se construyeron estos Jardines, en unos terrenos, situados en la parte izquierda de la antigua “carretera de Aragón”, un poco más allá de la plaza de toros que estaba al lado de la calle de Alcalá. En esta época se encontraba, en pleno desarrollo, la ampliación y urbanización de esta zona de la ciudad promovida por el Marqués de Salamanca. Se adjunta un plano de situación en el que se puede ver que estos Jardines de ubicaron en lo que hoy se conoce como Barrio de Salamanca y frente al Parque del Retiro. Estos Jardines se extendían por las actuales calles de Alcalá, Velázquez, Goya y Castelló. Había un autobús desde la Puerta del Sol hasta los Campos, al coste de un real.


Figura 4. Plano de situación de los Campos Elíseos 

Para poder disfrutar de los Jardines, durante todo el año, se pusieron a la venta abonos de 12 euros/año por persona, como entrada general. Para disfrutar de otras atracciones había que abonar una pequeña cantidad.  La entrada costaba dos reales hasta las cinco de la tarde y cuatro desde esta hora, en adelante.
El Jardín era muy amplio pero como se construyó, rápidamente, las plantas, las flores y los árboles no tenían el tamaño suficiente para dar alivio y frescor, aunque por la noche la temperatura era agradable.
El Jardín tenía una serie de edificaciones donde se realizaban distintas actividades lúdicas:
El teatro “Rossini” donde se daban representaciones de ópera. Una Plaza de toros aprovechando otra anterior que se demolió, en 1874, por problemas estructurales. Una Montaña rusa construida de mampostería y maderos, de grandes pendientes, que divertía mucho a los jóvenes.  Un Salón de Conciertos y Bailes.


Figura 5. Interior del Salón de Conciertos y Bailes

La Fonda o restaurante donde había salas aisladas, con el nombre de cada una de las provincias. La Casa de Baños se encontraba en un nivel superior al de la Fonda, los cuartos de pilas daban a un jardincillo y una Ría con un barco de vapor de ruedas y cinco falúas.


Figura 6. Vista de la Ría

Pasados tres años después de su inauguración (1867) empezó a decaer; se alquiló la plaza de toros, se destinó un espacio para bailes campestres. Se hicieron juegos de cucaña y en el teatro se realizaban ejercicios de gimnasia, etc.
El parque siguió funcionando, con cierto éxito, hasta finales de 1880, fecha en la que concluye el período máximo de contrato de 15 años. Además, hay que tener en cuenta, que el barrio de Salamanca se extendía hacia esta zona de la ciudad y ejercía presión sobre los terrenos en los que se pensaba construir. 


Figura 7. Baile en las Campos Elíseos 

Al decaer los “Campos Elíseos”, comenzó a tomar auge los “Jardines del Buen Retiro”, nombre que se dio al antiguo Real Sitio que se llama “Huerta del Rey” o de “San Juan”. La corte de Amadeo de Saboya comenzó a ponerlos de moda.  
“Los Nuevos Campos Elíseos”
Estaban situados en el actual parque de la Fuente del Berro que aprovechó, durante algún tiempo, el actual palacete donde se instaló un restaurante. El resto de las instalaciones: invernaderos, torre-mirador, un velódromo, una montaña rusa, así como algunas zonas ajardinadas que ya no se conservan.

“Jardines del Circo Price”
El Circo Price, en poco tiempo, se convierte en un polo de atracción. El Circo se encuentra situado en la calle de Recoletos, cerca de su posterior ubicación definitiva, en la Plaza del Rey. En enero de 1868, Thomas Price alquila a la duquesa de Medina de las Torres una parte de su jardín entre el Paseo de Recoletos y la calle de Piamonte, para instalar dichos Jardines. La iluminación artificial llega al Circo y a los jardines contiguos a la pista circense. Los espectadores pueden pasear por el lugar y disfrutar de la noche madrileña.  

Con esta muestra de estos “Jardines de Recreo”, nos podemos hacer una idea de la cantidad de lugares de diversión para los madrileños, aunque la situación económica no era muy buena, sin embargo, aquellos dedicaban bastante tiempo al ocio y a las actividades lúdicas.
Estos Jardines estaban situados en la propia ciudad, aprovechando espacios libres, plazas y otros lugares más alejados, como el caso de los “Campos Elíseos”. Este Jardín era el que tenía mayor extensión por su situación periférica y tenían una gran cantidad de dotaciones dedicadas al divertimento, e incluso al deporte.  

Fuentes de Información:
  • ARIZA MUÑOZ, Carmen. Los Jardines que la Comunidad de Madrid ha perdido. Espacio, tiempo y forma. Serie VII, Historia del arte, nº 14.2001
  • ARIZA MUÑOZ, Carmen. Jardines de recreo en Madrid, los llamados Campos Elíseos. Goya Revista de arte, nº 204, 1988.
  • DE LARRA MARIANO José, Revista Española nº20 de junio de 1834
  • GEA, Mª Isabel. Diccionario Enciclopédico de Madrid. Ediciones La Librería, 2002
  • GEA, Mª Isabel. El Madrid Desaparecido. (Página 99). Ediciones La Librería, 2003
  • SANCHEZ MENCHERO, Mauricio. Cinco cuadros al fresco. Los jardines de recreo en Madrid (1860-1890). Culturales; Vol V, nº9. Universidad Autónoma de Baja California. México.
  • VERDÚ RUIZ, Matilde. El arquitecto Pedro de Ribera (1681-1742). Instituto de Estudios Madrileños. Madrid, 1998.

Fuente de información de las imágenes
  • Figura 1. Esquema de la ocupación del Convento Mercedarías Descalzas de San Fernando (Mª Isabel Gea, El Madrid Desaparecido. Página 99)
  • Figura 2. Vista actual del Pasaje de la Alhambra (Foto del autor)
  • Figura 3. Vista actual del espacio de los Jardines del Arquitecto Ribera. Fuente de la Fama. (Foto del autor)
  • Figura 4. Plano de situación de los Campos Elíseos http://urbancidades.files.wordpress.como/2011/01/baile-campos-eliseos 1865.jpg)
  • Figura 5. Interior del Salón de Conciertos y Bailes. (Publicado en el nº 29 de Museo Universal, del 16/07/1865)
  • Figura 6. Vista de la ría. (Publicado en el nº 29 de Museo Universal, del 26/06/1864)
  • Figura 7. Baile en las Campos Elíseos. 1865 (La Ilustración Española y Americana. 1865)


Índice de Figuras
Figura 1. Esquema de la ocupación del Convento Mercedarías Descalzas de San Fernando

Figura 2. Vista actual del Pasaje de la Alhambra

Figura 3. Vista actual del espacio de los Jardines del Arquitecto Ribera. Fuente de la Fama

Figura 4. Plano de situación de los Campos Elíseos

Figura 5. Interior del Salón de Conciertos y Bailes

Figura 6. Vista de la Ría

Figura 7. Baile en los Campos Elíseos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario