“…
un oficial, de uniforme azul, mandaba las dos piezas colocadas frente a la
calle de San Pedro la Nueva (hoy del Dos de Mayo). Por cuenta de otro, del
mismo uniforme y graduación, corrían las que enfilaban las calles de San Miguel
y de San José (hoy de Daoiz y Velarde), apuntando una de ellas hacia la de San
Bernardo, pues allí se esperaban nuevas fuerzas francesas en auxilio de las que
invadían la Palma Alta y sitios inmediatos a la iglesia de la Maravillas”.
Esta
es la referencia que se hace de la iglesia de las Maravillas en el asalto del
Cuartel de Artillería de Monteleón (2 de mayo de 1808). Episodios Nacionales (el 19 de marzo y el 2 de mayo. Capítulo XVIII).
Su fundación
El
culto de la Virgen de las Maravillas es muy antiguo, anterior al siglo XVI,
aunque su iglesia de construye en el siglo XVIII. El nombre del “Barrio de las
Maravillas” viene de dicha Virgen; actualmente se denomina “Universidad”
limitado por las siguientes calles: Princesa, Alberto Aguilera, Carranza,
Fuencarral y Gran Vía.
Su origen se remonta al
año 1613, cuando una dama piadosa, doña Juana Barahona, fundó un Beaterio de Recogidas
Terciarias Carmelitas, en una pequeña casa de la calle de Fuencarral. En 1616
se trasladan a la calle de la Palma, al lado de la Ermita de San Antón que se
encontraba allí. Años después, en 1624, las beatas se constituyen en comunidad,
fundando el Convento que se conoce como Nuestra Señora de Maravillas, para ello
vinieron religiosas del Convento de la Concepción de Alcalá.
Se construye la actual Iglesia
y se inaugura el 2 de febrero de 1647; tiene una sola nave, con capillas
laterales y un pórtico, en la esquina de la calle de la Palma con la del Dos de
Mayo; a base de arcos de piedra de medio punto. El proyecto se atribuye a los
arquitectos Alonso Carbonell y Cristóbal Aguilera, autores del Palacio del Buen
Retiro. En la Figura adjunta se ve la Iglesia y el Palacio de Monteleón, al
cual nos referiremos más adelante, con
todo detalle.
Figura
1. Plano de Texeira
El verdadero nombre del
Convento es de San Antón, nombre arriba citado. La denominación de “Maravillas”
viene de una imagen de la Virgen que se veneraba en su interior y que llevaba
en sus manos una flor de “maravilla” (caléndula). Según la leyenda, las monjas
encontraron un Niño Jesús entre las “maravillas” y lo colocaron en el regazo de
la imagen; como la figura del Niño era muy pequeña, le hicieron un lecho de las
citadas flores que le resaltaba.
A lo largo del tiempo
la Iglesia de las Maravillas ha sido objeto de varias reformas, la más
importante fue en el siglo XVIII, en 1770, transformando elementos barrocos de
su interior en elementos neoclásicos. En la calle de la Palma se construye una
puerta de entrada de granito con pilastras toscanas y un frontón, en 1869 se
añade la espadaña actual.
Como veremos a lo largo
del post, este Convento ha recibido varias denominaciones a lo largo de su
existencia, por varias razones, incluso cuando se realiza su traslado a la
ubicación actual. Su origen viene de una de las iglesias más antiguas de
Madrid, anterior al Fuero de 1202, situada en la plaza del Conde Miranda y en
la calle de San Justo, desaparecida a finales del siglo XVIII. La iglesia de
San Miguel de los Octoes fue demolida en 1809, que estaba situada en el actual
Mercado de San Miguel. La parroquialidad de San Miguel se unió a la de San
Justo y Pastor, denominación anterior de la actual basílica de San Miguel.
Finalmente en 1890, la parroquia de los niños San Justo y Pastor se trasladó a
la de las Maravillas.
Sobre parte de la
actual Plaza se asentaba el antiguo Convento de las Maravillas de monjas
carmelitas del que sólo queda la citada iglesia.
Como se ve en la Figura
1, detrás de la Iglesia y del Palacio de Monteleón estaba situada la “Puerta de
las Maravillas” cuyo nombre se debía al Convento. Ambos edificios estaban
separados por la calle de San Miguel, hoy parte de la calle de Daoiz. La mencionada Puerta era, en
realidad, un sencillo portillo que
desaparece en 1690 al ampliar los duques el palacio; obra realizada por
Jerónimo Churriguera para residencia de los marqueses. Fue ocupado por personajes importantes de la
corona: Isabel de Farnesio y su hijo, el infante Don Luis. Sufrió varios
incendios que lo deterioraron. Tenía una amplia huerta y un gran jardín.
En el Plano de Tomás
López (1785). (Esquema Parcela nº 2, La
Vida Cotidiana en el Madrid del siglo XVIII, se puede ver un plano de toda
la zona.
Figura
2. Plano de Tomás López
Los límites son: c/San
Bernardo y actuales Carranza y Fuencarral. Se indica la Puerta de los Pozos de
Nieve. En dicho esquema destacan: Convento de las Maravillas (1), Pozos de
Nieve (2) y Hospicio (3). En el trapecio (7) está vacío y corresponde al
espacio donde se encontraba el Palacio de Monteleón. El Convento de las Salesas
Nuevas, c/San Bernardo, 72 se construye unos años después en 1798, estaría
situado en la parte inferior izquierda del citado trapecio. Asimismo, parte del
mismo está, actualmente, ocupado por la Plaza del Dos de Mayo.
Su papel en el
Dos de Mayo
En la actual Plaza del
Dos de Mayo estuvo situado el Cuartel de Artillería de Monteleón, sobre el
Palacio del mismo nombre, donde los
famosos Daoiz y Velarde se enfrentaron a los franceses y murieron junto a otros
muchos madrileños en la citada jornada del Dos de Mayo de 1808. En 1807, Godoy
había adecuado los edificios como Parque, Museo y Armería del Cuerpo de
Artillería. La mitad del solar estaba ocupado por edificios dedicados a
vivienda.
Son varios los pintores
que representan en sus cuadros los sucesos del Dos de Mayo en la defensa del
Cuartel de Monteleón: Joaquín Sorolla pinta en 1884 la “Defensa del Parque de
Artillería de Monteleón”; el romántico Leonardo Alenza pintó en 1835 la “Muerte
de Doiz y Velarde en el Parque de Artillería de Monteleón”. Pero el que mejor
representa estos sucesos es Manuel Castellano: “La muerte de Daoiz y defensa
del Parque” de 1862 y “Muerte de Velarde el dos de mayo de 1808”, pintado en
1862 (al fondo se ve la Iglesia de las Maravillas, tras las tapias del cuartel).
El cuadro original se conserva en el
Museo de Historia de Madrid y en éste se ve perfectamente, en la parte
superior, el remate de la citada Iglesia que en la figura adjunta está cortada en
su parte superior.
Figura
3.”Muerte de Velarde el dos de mayo de 1808”
Según las crónicas, las
monjas atendían a muertos y heridos de ambos bandos, adecuando una zona del
Convento como Hospital de campaña.
No sólo murieron soldados
del Parque de Artillería sino que también se produjouna matanza entre la gente
que pasaba por allí. Contra el muro del Convento se fusilaron a bastantes
hombres; la cifra exacta de fallecidos es imposible de establecer ya que las
actas de defunción de hicieron desaparecer de los libros parroquiales.
Asimismo, en esta zona murieron Clara del Rey y Manuela Malasaña.
En el atrio de la
Iglesia hay una “Placa conmemorativa de homenaje” a la labor de las monjas y
del capellán.
Figura
4. Placa conmemorativa
Derribo y
traslado
Teniendo en cuenta que
el Cuartel había sido destruido, con motivo de la Desamortización se decide la
demolición del Convento para realizar la configuración de la Plaza, abriéndose
nuevas calles; dicho derribo se realiza en 1869. Parte del jardín del Palacio sigue existiendo
en el huerto de las monjas de las Salesas Nuevas (c/San Bernardo, 72). En la
Figura adjunta se puede ver el mal estado de ambos edificios, como quedaron
después de la contienda.
Figura
5. Convento y ruinas del Cuartel
La estructura urbana
era muy distinta a la actual que se remodeló a mitad del siglo XIX. Ya hemos
comentado que en el solar estaba el cuartel de Monteleón sobre el antiguo
palacio de los duques del mismo nombre; se abrieron nuevas calles: Ruiz,
Malsaña y Monteleón y otras cambiaron de nombre: Daoiz, Velarde y se configura
la Plaza del Dos de Mayo.
Figura
6. Planimetría del siglo XIX
En el centro de la Plaza
se encuentra un monumento conmemorativo que representa a los héroes en su lucha
con los franceses (Figura 7), bajo el arco de entrada que representa la puerta
del antiguo cuartel. La escultura de mármol es de Francisco Jareño y Alarcón y
Antonio Solá; es un ejemplo de escultura neoclásica promovida por el rey
Fernando VII (1822) y sufragada por el Cuerpo de Artillería. Esta escultura ha
tenido varios emplazamiento: frente al Museo del Prado (Puerta de Velázquez),
Parterre del Retiro, en la confluencia de las calles Carranza y Ruiz y
finalmente en el lugar actual. Los héroes están enterrados en el Monumento a
los Héroes del Dos de Mayo, en el Paseo del Prado.
Figura
7. Escultura de los héroes Daoíz y Velarde
Después de dicha
demolición sólo queda en pie y en uso la Iglesia de San Justo y Pastor; a la
misma se accede por el pórtico de la calle de Dos de Mayo, la portada de la
calle de Palma está cerrada. En su interior destaca el retablo de la Imagen de
la Virgen; en una capilla, situada al
fondo de la epístola se fundó la Orden Humanitaria de la Santa Cruz y Víctimas
del Dos de Mayo. Esta Orden Hospitalaria fue el germen de la Primera Asamblea
de la Cruz Roja española. En dicha capilla se encuentra una imagen del Cristo de la Buena Muerte, anónimo del
siglo XV, que debía proceder de San Miguel o del convento de San Gil. En la
Figura 8 se puede ver una vista de la Plaza actual y de la Iglesia.
Figura
8. Vista de la Plaza del Dos de Mayo
En una
de sus fachadas que; corresponde a la zona que se demolió el Convento, se aprecia una placa conmemorativa de la lucha
de Daoiz y Velarde, en el Dos de Mayo, en contra de las fuerzas de Napoleón.
Figura
9. Vista de la Iglesia desde la calle de la Palma
Como podemos ver en la
Figura adjunta la estructura urbana es muy distinta a la primitiva: abriéndose
nuevas calles y construyéndose varios edificios de viviendas.
Figura
10. Planta de la Plaza del Dos de Mayo y aledaños
Las monjas sufrieron
varios traslados. En primer lugar fueron
acogidas por las mercedarias del Convento de Juan de Alarcón (“Alarconas”) en
la calle de Valverde, donde estuvieron hasta el año 1891. Después se
trasladaron a un hotelito del Paseo del Obelisco (actual General Martínez
Campos); allí construyeron una capilla donde instalaron una imagen de la
Virgen. No pudieron pagar las obras y se trasladaron, de nuevo, a las
Comendadoras de Santiago que las recibieron.
Después de los
sucesivos traslados, finalmente, las monjas encontraron el acomodo definitivo.
Gracias a la cesión y el patronazgo de los señores don Saturnino Calderón y su
esposa Milagros Gosalvez, les donaron un amplio solar de 1.742 m2 en
la calle de Príncipe de Vergara, esquina a la calle de Goya.
El día 20 de mayo de
1902 se puso la primera piedra del nuevo edificio; éste se acabó dos años más
tarde y se inauguró en marzo de 1904. El proyecto del templo y del Convento se
realiza por Manuel Ortiz de Villajos, con su estilo ecléctico impregnado de
elementos neogóticos, muy típico de la citada época, de comienzos del siglo XX.
La denominación actual del conjunto es “Maravillas Nuevo”.
En la Guerra Civil, la
iglesia sufrió numerosos daños en su decoración, perdiéndose varias imágenes;
fue necesario realizar una nueva de “Nuestra Señora de las Maravillas”, obre de
Ricardo Font, en 1940.
Figura
11. Vista de la fachada del conjunto de “Maravillas Nuevo”
Este arquitecto junto a
su hermano Agustín, son los autores del Colegio-Asilo de Santa Marca (Plaza de
la Virgen Guadalupana). Emplean elementos mudéjares, de moda en la época,
especialmente para este tipo de instituciones (conventos, asilos, colegios,
iglesias, etc.) Por su carácter tardío,
se emplean otros elementos como son detalles neogóticos en ventanas y pináculos
que rematan las cubiertas.
Fuentes de Investigación:
DEL
CORRAL, JOSÉ. La vida cotidiana en el
Madrid del siglo XVIII. Ediciones LA LIBRERÍA.
GARCÍA
GUTIERREZ, PEDRO F y MARTÍN CARBAJO, AGUSTÍN F. Iglesias Conventuales de Madrid. Ediciones LA LIBRERÍA. 2011.
GEA,
ISABEL El Madrid Desaparecido.
Ediciones LA LIBRERÍA, 2003.
OSORIO
GARCÍA DE OTEIZA, CARLOS. IGLESIAS DE
MADRID. Ediciones LA LIBRERÍA. 2014.
NAVASCUÉS
PALACIO, PEDRO. La Casa-Palacio y el
Asilo Santamarca. 1984. Archivo Digital UPM.
Fuentes de información:
Fuentes de
información de las imágenes:
- Figuras 4,7,9 y 11: Fotografias del autor
- Figura 1. Plano de Pedro de Texeira. 1656.
- Figura 2. Plano de Tomás López.1785. DEL CORRAL, JOSÉ. La vida cotidiana en el Madrid del siglo XVIII. (Pág. 200). Ediciones LA LIBRERÍA.
- Figura 3. “Muerte de Velarde en dos de Mayo de 1808”. Manuel Castellano 1862. www.somosmalasana.com/el-dos-mayo-de-1808-en-la-pintura/
- Figura 5. Convento y ruinas del Cuartel de Monteleón. madridconvento-sigma.blogspot.com-es/2013/05/iglesia-de-las-maravillas-y-plaza-del.html
- Figura 6. Planimetría de Madrid del siglo XIX. Levantamientos topográficos del Instituto Geográfico Nacional.
- Figura 8. Vista de la Plaza del Dos de Mayo. Nuestra Señora de las Maravillas/ Arte en Madrid
- Figura 10. Planta de la Plaza del Dos de Mayo y aledaños. Nomecalles. Nomenclátor oficial y callejero
Índice de figuras:
Figura
1. Plano de Pedro de Texeira
Figura
2. Plano de Tomás López
Figura
3. “Muerte de Velarde en dos de Mayo de 1808”
Figura
4. Placa conmemorativa
Figura
5. Convento y ruinas del Cuartel de Monteleón
Figura
6. Planimetría de Madrid del siglo XIX
Figura
7. Escultura de Daoiz y Velarde
Figura
8. Vista de la Plaza del Dos de Mayo
Figura
9. Vista de la Iglesia desde la calle de la Palma
Figura
10. Planta de la Plaza del Dos de Mayo y aledaños
Figura
11. Vista de la fachada de “Maravillas Nuevo”
Una obra de arte, gracias por enseñarnos nuestra historia.
ResponderEliminarUn saludo, PepÓk